Congreso Jovenes Con Valores

Buenas, queridos amigos:

Siempre pensamos que actualmente los jovenes de nuestra sociedad estan atrapados por una red circunstancial llena de relativismo radical, hedonismo, nihilismo, etc… y que falto de valores, se dedican a sus asuntos privados sin importarles la sociedad. Pues bien, esta apreciación he podido comprobar, que no es del todo correcta, ya que aun hay cabida para la esperanza.

Hoy he estado en un Congreso de jovenes con valores que se ha desarrollado en Sevilla, denominaba «lo que de verdad importa». Este acontecimiento nació el año pasado en Madrid, teniendo una gran aceptación en el público joven, mayoritariamente estudiantes universitarios, y que por su gran acogida se decidió expandir esta idea por otras ciudades de España, es por eso que este año se inagura por primera vez en Sevilla dicho Congreso y por segunda vez el próximo día 25 de Noviembre en Madrid.

Este Congreso es organizado por la ONG «Cooperación internacional», es una organización española sin ánimo de lucro, fundada en 1993 por profesores universitarios y jóvenes profesionales. Declarada de Utilidad Pública (Orden Ministerial de 8 de enero de 1999) e inscrita en el Registro de Asociaciones del Ministerio del Interior nº 129.466. Dicha organización esta dedicada a la promoción de la solidaridad entre jóvenes para el desarrollo, la educación de los niños y la promoción del voluntarismo juvenil.

Este Congreso se desarrolló dentro del Hotel NH Convenciones cuyas instalaciones estaban adaptadas para el desarrollo de este tipo de eventos. A este congreso acudieron más de 1500 jovenes venidos de todos los puntos de España. Tanta fue la aceptación que la organización por problemas puramente de aforo, tuvo que rechazar 5.000 inscripciones. La buena aceptación de este foro de valores, fue el hecho de que fuera totalmente gratuito, lo cual facilitó la asistencia.

Fueron cuatro ponentes, todos ellos de un calibre extraordinario, en los que imprimian una serie de valores encomiables y cargados de una esencia humana perceptible plenamente, como: el valor del sacrificio y servicio a los demas (Jaume Sanllorente); el valor de la heroicidad en los momentos trágicos (William Rodriguez); el valor del esfuerzo y la lucha contra la droga (Pedro García Aguado); el valor de la conversión verdadera (Eduardo Verástegui).

Pero os voy a hablar un poco de estos grandes personas de nuestro mundo:

El primero en participar fue «Jaume Sanllorente», fundador de la ONG «Sonrisas de Bombay», un hombre que lo tenía todo, un hombre tenía la vida solucionada, pero un paquete de viaje denominado «Indian Libertad», le cambió la vida, paso de una vida de bullicio, de ruidos mundanos, de excesos del 1er. mundo… a otra en la que las risas infantiles se sucedían, los humildes agradecían y donde las pequeñas cosas se convertían en grandiosas. Su ONG ayuda a más de 6.000 niños en la ciudad de Bombay, lo dejó todo por las personas más necesitadas de este mundo. Él nos decía que: “de nada vale protestar por el mundo en el que vivimos sin tomar parte activa en el mismo. Somos un pigmento en ese gran cuadro que es la sociedad, si nosotros pintamos un pedacito de ese gran muro negro, animaremos a los demás a que también lo hagan y juntos construiremos un mundo mejor”.

Su intervención me llegó tan dentro, tocó de tal forma mi sensibilidad humana, como nadie lo había hecho hasta el momento, que yo, que no me fio de las ONG por las tremenda tropelias de las que he sido informado, que como poseedor de una fe tremenda, me he hecho socio de dicha ONG para financiarla con mi cuota, porque algo más elevado que yo, me decía en mi interior que este hombre es un elegido y que si el Señor me ha enviado a aquí para escucharle es porque he de intervenir junto a él.

El segúndo ponente de la mañana fue: «William Rodriguez» ultimo superviviente del 11 de Septiembre de 2001 de la Torre Norte del World Trade Center. Un hombre de una humildad plena, de una sencillez enorme, él era el barrendero de las torres gemelas, tenía que limpiar los 110 pisos de escaleras de la Torre Norte, esto nos lo recordaba siempre él: yo era el barrendero, pero vosotros estaís estudiando para servir a la sociedad, vosotros podeís con vuestro trabajo ser mejores heroes de lo que pude ser yo. Su intervención era la que más esperaba, puesto que el acontecimiento del 11-S me llegó tan dentro de mi, que siempre digo que aún no siendo americano, lloro y siento como un americano. No me desfraudó en absoluto, fue más de lo que esperaba, lo más alucinante fue cuando nos enseñó la llave de la esperanza, una llave maestra que poseía William Rodriguez , que subió junto a los bombreros  y que fue abriendo las puertas de todos los pisos liberando a muchas personas, siendo el último en salir de la Torre Norte, esta se desplomó sobre él, él se resguardó debajo de un camión de bomberos y 2 horas mas tarde le sacaron de entre los escombros. William Rodriguez nos mostró cómo el valor que generamos en situaciones adversas es capaz de salvar muchas vidas, a la vez que “la compasión humana es más duradera que la violencia”.

En la jornada de Tarde de dicho Congreso, le tocaba el turno a Pedro García Aguado, campeón olímpico de Waterpolo en Atlanta´96, que cayó en la droga. Fue una conferencia muy emotiva e ilustrativa de como la droga te va destrozando a ti, a tu familia y a tu nucleo social. Cuando pudo dejar la droga, escribió un libro denominado «Mañana lo dejo», que ha ayudado a muchas personas en su misma situación. Nos enseñó a todos que le aplaudamos la importancia de “aprender a controlar la actitud sino ésta nos acabará controlando y, sin quererlo, haremos mucho daño a las personas que queremos”.

Por último, estuvo como ponente Eduardo Verástegui, productor de la película Bella, un film que ha sido un éxito en EE.UU y España; y ganadora del Certamen de Cine independiente de Toronto (Canada) el más importante del mundo. Nos enseñó el verdadero valor de una vida cristiana integra y nos enseñó su vida como ejemplo y reflejo de la conversión, porque él empezó siendo una celebridad de la canción y de la televisión, donde el vicio, las mujeres y el alcohol reinaban por todos lados, hasta que el destino le tocó y dió un giro de 180º hacia una vida mejor. Nos dió toda una lección de principios. “Si pierdes tu integridad, lo pierdes todo. De qué le vale al hombre conquistar el mundo si se ha perdido a sí mismo”, asegura el actor.

Este Congreso fue de una sensibilidad humana y espiritual, increible, porque se palpaba en el ambiente, se sentia en los corazones de los asistentes… como las humildes y sencillas palabras de nuestros queridos ponente, iban tocando uno a uno toda nuestra esencia, para que nos dieramos cuenta que el mundo esta más alla de donde llega nuestra vista, que hay algo más ahi fuera que hace que el mundo sea mundo y que le da su sentido y forma.

S. M. I. El Emperador